Leonel ha tenido que redefinir su camino, cuan Adán expulsado del paraíso…
No conozco de encuestas… cuando las leo siento una profunda duda… alguien miente… un grupo miente… o todos ellos mienten… ¿cómo tantas personas y grupos empresariales se ponen de acuerdo para un plan?.
Las telefónicas son competidoras pero se ponen de acuerdo, los «super» son competidores pero se ponen de acuerdo… pues, parece, que las encuestas compiten entre si pero igualmente, se ponen de acuerdo.
Leonel «no vio llegar» a su matador, durante años se alimentaron mutuamente y mientras él se bañaba con saco y corbatas, entre avión y avión, discurso a discurso, el «otro» socavaba las bases de su partido para terminar expulsándolo al vacío… pero lo dejó con vida.
Leonel ha tenido que redefinir su camino, cuan Adán expulsado del paraíso… ahora tuvo que ponerse a laborar… sin las herramientas en las manos y usando de recurso solo su liderazgo.
Presidente de la república por tres períodos, vio evolucionar su país y fué testigo de la aparición de Internet y los teléfonos inteligentes que cambiaron la forma de comunicanos, para siempre.
Por desgracia para él, no redefinió su propio «personaje». Los discursos siguieron por arriba sin darse cuenta que debia bajar, su manga quedó larga sin darse cuenta que debía remangársela, la comunicación la dejó a lo «podium» sin entender que el «yo te digo tu me dices» habia llegado para quedarse y para colmos, los asesores y voceros siguieron siendo los mismos, incluidos dinosaurios que debieron haberse extinguido o si no, ocultarse para exponer una nueva cara al Leon, clonado con oveja y otras especies con el cual pudiera codearse más con las bases, viejas bases, y nuevas de ellas, además.
No hubo tiempo a primarias.
Inventaron alcaldías con candidatos no conocidos, inventan hoy diputaciones que no arrojarán un voto y senadores obsoletos que se hinchan cuando ven un anuncio colgado en un sucio poste ensuciado con sus caras… como gran cosa.
Leonel existe, si, pero al menos en Santo Domingo Este, no se sabe quien dirige, no se sabe quienes son, no se sabe dónde se reunen, los que necesitan prensa no acuden a esta, los que necesitan gente no acuden a ellas, creen que solo Leonel les dará algo… la gran incógnita.
En Santo Domingo Este la Fuerza del Pueblo no existe, incluso, hay demarcaciones donde, quien debería estar organizando el partido también es candidato, en un ejercicio antiético pero además, anti-dirigencial, pues es claro que ser juez y parte, nunca fue justo.
La figura de Leonel es tan fuerte que por percepción los aguacates cuelgan de cada poste y cada cable en Santo Domingo Este, pero adolecen de líderes, son una diáspora infinita, invisibles a los ojos del electorado y de la prensa, en medio de dirigentes impuestos que no son dirigentes y el desconocimiento de los de arriba de quienes son los que hoy, mandan, buscan votos, el verdadero liderazgo que nada tiene que ver con aquellos que se beneficiaron con las mieles del «leonelismo» en el poder y terminaron siendo líderes de la nada por un ejercicio fatal de aburguesamiento y creerse eternos.
Leonel tiene que reinventarse… Leonel no conoce, por ejemplo, Santo Domingo Este, el del hacinamiento, el de la pobreza, el de los apagones, la marginalidad, el olvido… Leonel, y tiempo tiene y seguro tendrá, tiene que volver a reencontrarse con República Dominicana y no verla desde planes a largo plazos cuando sus gobiernos terminaron con casi todos los capitulos abiertos, inconclusos.
Tiene suerte Leonel que existen las redes sociales y que el sentimiento hacia él es tan fuerte que pasa de red en red, casi sin ruido, como sin ruido se expanden sus resultados, por muy contundentes que sean.
Leonel visitó Santo Domingo Este y solo los _aguacates_ se enteraron, pero no el pueblo, pues no existe quien conecte al leon con el resto de la manada.
Leonel… después que todo… es un tipo con suerte… que esta le siga o le abandone… será la historia por venir.